Por Luciano Rodrigo Moreno* Entendiendo que es de carácter imperativo lograr una modificación sustancial de la ecuación política de la provincia, fortaleciendo el régimen democrático y republicano, es que presenté este humilde aporte en la legislatura fueguina, que, desde mi modesta perspectiva, puede marcar un atinado comienzo en torno a este horizonte. El proyecto fue presentado el 30 de Marzo de 2016 en la Mesa de entrada de la Legislatura Provincial Fueguina bajo en número de Registro 468. También en la Municipalidad de la Ciudad de Ushuaia el 5 de Abril de 2016 recibo bajo el nro de reg 422.
La iniciativa busca:
1)_ Realizar un programa televisivo, cada 3 meses y durante todo una semana (Ej: Lunes, Miércoles y Viernes) donde se explique, de manera entendible para el público en general, qué es un presupuesto, cuál es la evolución histórica de nuestro presupuesto, de donde salen los recursos que lo conforman y cómo se va ejecutando durante el año actual.
2)_ Crear una página web clara y didáctica, donde estos programas televisivos sean puestos a disposición del público, y donde además de ellos, se hagan videos explicativos, exclusivamente para dicho sitio, de cómo entender la lógica de un presupuesto, la ejecución del gasto y de donde se obtiene la provincia sus recursos.
La “TELEvisibilización Presupuestaria”, es una iniciativa que aúna:
-la “visibilización”: que es “poner a la vista (hacer visible), por algún procedimiento o dispositivo, lo que normalmente no se puede ver de manera inmediata o sencilla;
-“la televisión”: que es uno de los instrumentos visibilizadores de mayor divulgación en la actualidad;
-y la necesidad imperiosa de lograr una mayor y real exposición pública de las cuentas de los presupuestos de la Provincia y los Municipios, porque solo eliminando las cuestiones ficticias tendremos la posibilidad de ver los verdaderos problemas y alcanzar las soluciones.
Esta propuesta fue confeccionada y presentada porque entendí que existe un claro desequilibrio de las cuentas provinciales, el cual es necesario explicar en su totalidad y claramente a cada ciudadano, ya que llegamos a un punto crucial donde, solo el ver, magnificar y entender los procesos que desembocaron en la situación actual, puede unirnos para dilucidar y afrontar el camino más conveniente al conjunto de la sociedad.
Es mi objetivo tratar de forjar un individuo y una sociedad con más certezas que incertidumbres acerca la cosa pública, porque creo que será solo en ese momento, o su tránsito a él, donde encontrará y encontraremos el equilibrio, no solo internamente de manera individual, sino con el entorno social, del cual somos realmente parte como ciudadanos.
Un buen gobierno no debe ni puede conformarse con que el habitante medio tenga sólo contacto conceptual claro con aquello que facilita o dificulta la obtención de los fines personales e individuales inmediatos, en desatención del colectivo de la sociedad; por ello esta iniciativa busca plantear una solución viable y efectiva, que, al ser guiada por un estado responsable e interesado, genere el empoderamiento político-económico-conceptual de cada ciudadano.
Esta iniciativa busca perfeccionar el panorama político, social y económico del habitante fueguino, acercandolo a la gestión y ejecución del gasto en sí -con sus evoluciones o retrocesos-, para que estos sucesos y procesos que cada día se tornan más imperativos sean comprendidos, se queden patentes en su mentalidad individual, y fomenten una concepción colectiva de la realidad, y así, en conjunto, poder aprender de ello y construir un futuro visible y claro para todos, utilizando la televisión y las nuevas tecnologías, para terminar con la obsolescencia pedagógico-ciudadana, que dificulta al vecino ubicarse en la realidad social, política y económica que atraviesa y transita el conjunto del cual forma indivisiblemente parte.
Para ello creo que paulatinamente se debe ir tratando de incorporar en el ciudadano, por medio de las herramientas comunicacionales más eficientes, este cúmulo de conocimientos tan fundamentales para que, con tiempo y gradualmente, pueda, en un futuro, observar un presupuesto provincial o municipal, de igual manera que un médico un análisis de sangre, y saber así, con ese ojo clínico, cuál es el camino que realmente representa sus intereses y el de la comunidad donde vive.
Como creo que es el Estado es quien tiene un rol fundamental en la fortalecimiento de la democracia y la consolidación de la república, es que entiendo que debe ser él quien debe tratar de achicar la brecha entre la información que maneja el gobernante-representante, y la que llega y puede procesar el gobernado, haciendo de cada ciudadano un núcleo de poder informado, pues esa es la única manera de lograr una sociedad realmente justa, equitativa, y por sobre todo, realmente consciente de sí misma.
La publicidad en el ejercicio del poder -en este caso en la conformación, aprobación y ejecución de un presupuesto-, no solo es un derecho político del ciudadano que a su vez diferencia al buen gobierno del vicioso, sino también, una necesidad moral imperiosa, así como un freno invaluable ante la ignominia política.
Ahora, sin ánimo alguno de querer decir que existe un ocultamiento deliberado del presupuesto y su ejecución, hoy no nos es posible creer honestamente, que por publicar en una página web, televisión, diarios, revistas o radios algunos números que para la generalidad de la comunidad son abstracciones descontextualizadas de su realidad inmediata, se está dando por efectivizado el citado principio de publicidad en su máxima exponencia, o que ese sea verídicamente el único y más efectivo instrumento para educar a los habitantes, en el manejo de los datos objetivos esenciales que ayudan a comprender el desarrollo de la vida económica de la provincia; porque así como no podemos quedarnos con que la única realización concreta de la democracia es el sufragio, no podemos detenernos en pensar que publicar datos, sin capacitar al receptor para realmente entenderlos, dimensionarlos y aplicarlos a lo cotidiano, es realmente una forma efectiva de visibilizar en el habitante fueguino el estado económico del conjunto social que conforma.
Cada día vemos que intervienen más factores jurídicos, económicos, políticos y sociales en la toma de decisiones orientada a determinar cómo dirigir el rumbo de todos, y como estos datos o coeficientes, especialmente los económicos, a pesar de dárseles un cierto grado de publicidad, son igualmente desconocidos por el grueso de las personas que componen la comunidad, tornándose esta inasibilidad absoluta o relativa de la información básica y necesaria para entender el contexto, en un factor determinantemente desfavorable para la sociedad misma en su conjunto, que en su gran mayoría, de no existir una política adecuada para acercarle el conocimiento a la comodidad del hogar, está destinada a ser profunda e ininterrumpidamente manipulada, incluso para actuar en detrimento de sus propios intereses.
En este mismo sentido, teniendo en cuenta el estilo de vida del ciudadano actual, pretender que éste utilice el tiempo que no está trabajando, pudiendo depositarlo en atención y amor a su familia, amigos, e incluso a él mismo, netamente en civismo responsable, es utópico hoy, e incluso es impensado llegar a ese cometido sin una gradual formación previa, y menos aún sin recorrer todo un proceso conjunto de transformación ciudadana.
Para colaborar en la construcción de un destino común, no solo es importante la participación, sinó la educación política del participante, pues es la única manera de que realmente comprenda qué es lo que debe representar aquella persona que elija, para llevar adelante esos ideales o intereses individuales-colectivos.
¿Cuánta participación y representación puede existir, en una realidad donde la mayoría desconoce conceptos y nociones esenciales que hacen al manejo de lo que es de todos, y cuyo conocimiento, manipulación y aplicación, potencian o limitan el crecimiento del individual y de la comunidad?, ¿que representación política puede existir si el ciudadano no está incentivado y debidamente capacitado para participar en el conocimiento básico que le permita cabalmente dimensionar lo que conforma, y con ello forjarse una idea que realmente represente sus intereses y en base a ellos sentirse realmente representado?.
Debemos entender claramente que el ciudadano sólo podrá ser realmente partícipe activo de su contexto, cuando aprenda a cómo depurar la información y utilizarla; por ello es fundamental lograr que se transforme en una función estatal ineludible, combatir y evidenciar, con información clara y veraz, la constante desinformación, deliberada o no, que se transmite en relación a las gestiones de los gobiernos que elegimos o las propuestas de los que pretenden ser elegidos, de lo contrario será muy pero muy difícil lograr continuidad y estabilidad en las políticas correctas, y este oscilante resultado de constantes antagonismos vacíos de propuestas reales y plagados de chicanas, solo nos llevará de una improvisación a otra, y de una catástrofe a la otra.
Tengamos presentes la inmortales palabras de un grande: “No hay empresa nacional sin pueblo, y no hay pueblo sin personas conscientes de que su vida cotidiana forma parte de la vida de la comunidad”. Raúl Alfonsín.
*El autor de la nota es fundador de la Unión Malvinizadora Argentina.