Un informe difundido este lunes elaborado por equipos técnicos de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav) proyectó el impacto que tendría el acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en la economía argentina: menor inversión pública, más endeudamiento externo, caída de las inversiones productivas, desplome del ahorro privado, retroceso del PBI, una inflación acumulada exorbitante y una fuerte pérdida del poder adquisitivo de los salarios públicos.
El objetivo del acuerdo es únicamente la eliminación del déficit para 2020. Pero al analizar las evaluaciones y proyecciones macroeconómicas del pacto, surgen las "posibles consecuencias" del crédito otorgado y un virtual "impacto" sobre las perspectivas económicas domésticas.
El PBI caería en 2018 a nivel agregado mientras que, en términos per cápita, finalizaría 2019 un 2,5% abajo por debajo de los niveles de 2015. "Buena parte de nuestras perspectivas dependerán de los precios internacionales de los productos que comerciamos con el resto del mundo, el desempeño macroeconómico de nuestros principales socios comerciales y la dinámica que verifiquen los flujos de capitales globales", subrayó el reporte académico.
La cuenta del pago de intereses de la deuda trepará a 3 puntos del PBI cuando se llegue al equilibrio fiscal, esto es, más del doble de los intereses que se pagaban en 2015.
Ante la ausencia de inversiones genuinas que permitan cubrir el rojo de cuenta corriente (la IED caerá este año en 0,8% del PIB), la contracara de reducción del déficit fiscal es la toma de deuda. "Así, según especifica el Fondo, el ratio de deuda externa a PBI cerrará 2019 casi 25 puntos por sobre los niveles del año 2015", resaltó el trabajo coordinado por el economista Santiago Fraschina.
La proyección inflacionaria es alarmante. "El 2019 cerrará con una inflación acumulada del 163% en cuatro años", pronosticó el informe.