Javier Iturralde y Jorge Mele son dos ingenieros industriales, que en 2017 presentaron en la Legislatura un proyecto que busca dar solución a la problemática de los residuos sólidos urbanos. Los Legisladores recibieron en el marco de la Comisión de Recursos Naturales, el asunto 581/17 y lo analizaron en ese espacio de debate. La propuesta es crear una planta de reciclado de vidrio en Ushuaia.
Oscar Rubinos fue el encargado de presentar el documento, que constituye el marco que regula la generación; transporte, tratamiento y disposición final de residuos sólidos urbanos, presentado por los profesionales para el análisis en ese espacio de debate.
En el norte del país, los envases son devueltos y reutilizados. Esto no sucede en Tierra del Fuego. “Esos recipientes son descartados y acumulados, generan un impacto negativo en la acumulación de residuos que podrían ser retornables y que regresen al norte del país a las embotelladoras correspondientes, aunque para concretarlo deben realizar trámites aduaneros”, explicaron los ingenieros. A pesar de ello, los estudios realizados demuestran que no sería posible o rentable esta opción.
Por otra parte, el proyecto plantea la opción de realizar un proceso de reciclado y reutilización para que ese vidrio, que no sea devuelto y se transforme en arena, por ejemplo. También, disminuir el volumen de rellenos sanitarios, podremos abastecer las canteras que hay en la Provincia para hacer hormigón”, ejemplificó Mele.
Ante la opción de una planta de reciclado para hacer estos trabajos, Mele explicó que, “luego de la recolección en las campanas, se depositan en una tolva que va disminuyendo el residuo, pasa por un tambor que limpia las botellas, luego por los colectores de polvo hasta lograr el producto”.
“La idea es que se envase en bolsones como los de arena y quede a disposición para ser mezclado para la construcción”, describió Iturralde, quien realizó la parte técnica del proyecto.
La mayoría de las empresas que venden bebidas, reutilizan más del 90% de sus botellas en el país, a excepción de Tierra del Fuego donde los envases no son retornables, lo que genera gran cantidad de residuos.
El proyecto plantea la posibilidad de consensuar alternativas de organización y gestión. Estas deben ser realizadas con el consenso de cada empresa y bajo cualquier forma de asociación. Pueden ser, por ejemplo, públicos y privados, para concretar la recolección y proceso al que deban someterse los residuos que generaron.
Las empresas por su parte, que comercializan botellas de vidrio, podrán tomar responsabilidad sobre los residuos que generan y lograr, mediante acuerdos con el sector público y privado, una solución sustentable en el tiempo, según plantea los fundamentos de la propuesta.
Finalmente, cabe señalar que el proyecto de Ley, también, será analizado por la Comisión de Medio Ambiente (4), que está presidido por la legisladora Andrea Freites.