La Gobernadora Fabiana Ríos aseveró que “el Gobierno no mintió ni engañó a nadie” ya que “nunca se suscribió ni comprometió un acuerdo” con las entidades sindicales que representan a los trabajadores del escalafón seco, sino que el compromiso del Ejecutivo fue “iniciar una discusión” a partir del resultado de la simulación salarial que elaboró la Dirección de Haberes durante la madrugada del jueves.
Esta simulación debía estar encuadrada “en los mismos términos del acuerdo que se había discutido y homologado con ATE” en febrero pasado, “con un modo de distribución diferente para que resulte satisfactoria a la demanda sindical”, detalló.
“Cuando trajeron la simulación, el Jefe de Gabinete Guillermo Aramburu firma la recepción de la simulación, comprometiéndose a reunirse a las 11” explicó la Mandataria en declaraciones brindadas a Radio Provincia. Pero “lo cierto es que los dirigentes salen con un grado de irresponsabilidad que asusta” anunciando un acuerdo salarial que nunca existió, porque “hubo una transmisión hacia los trabajadores que no tenía nada que ver con lo que se había dicho” cuestionó.
Por ello es que Ríos manifestó haberse sentido sorprendida “cuando se empieza a escuchar a las 7 de la mañana –del jueves- que ya se había llegado a un acuerdo”, a lo que le siguió el retiro de los trabajadores que ocupaban la Casa de Gobierno.
“El Gobierno no mintió ni engañó a nadie. Los trabajadores salieron de la Casa de Gobierno por lo que les dijeron. Si les dicen que acaban de ratificar el acuerdo y que van recibir un cien por cien de aumento, ¿cómo no van a salir de la Casa de Gobierno? El tema es quien mintió”, inquirió la Gobernadora.
Reiteró que “no se puede decir que pasó lo que no pasó. Aramburu no firmó un acuerdo y esto se le informó a la gente” y reclamó que “los dirigentes tienen que tener la responsabilidad de sus propias acciones”.
Respecto a qué salida puede hallarse al conflicto, la Gobernadora señaló que “la lógica de una negociación en cualquier caso es de presión y volver a discutir. Pero esto es presión creciente y no afloja nunca si no hay dinero, y la verdad es que dinero no hay más, salvo ese 1% que iba a sumar a una totalidad de masa del 28% al mes de septiembre, distribuido de la manera más justa considerada por las entidades gremiales”.
Recordó que “hace una semana que la actividad administrativa de las transferencias de recursos no se puede desarrollar en tiempo y forma ¿Qué sigue después?, ¿Un paro porque no se liquidan los sueldos en tiempo y forma? ¿Un paro o una movilización porque las pensiones no se pagan dentro de los plazos legales? se preguntó.
Reflexionó que “en la vida uno tiene que hacerse cargo de las cosas que hace y las que no. Llevamos adelante las acciones legales y de gestión que corresponda. Si hay un conflicto de dos, hay dos que deben intentar resolverlo” concluyó.