Autoridades del Ministerio de Salud, del Hospital Regional de Ushuaia y de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, participaron el último viernes de un intercambio –por videoconferencia- con el área de Salud Ambiental de la cartera sanitaria de Río Negro, en el marco del proyecto FESP (Funciones Esenciales y Programas de Salud Pública) de Salvaguarda Ambiental, y que fuera monitoreado por funcionarios del área a nivel nacional.
El objetivo del encuentro, mantenido en la Biblioteca del nosocomio capitalino, fue “ver de qué manera se puede enriquecer el trabajo que se está haciendo en Tierra del Fuego y en Río Negro”, explicó la licenciada en Gestión Ambiental Antonella Risso, del Ministerio de Salud de la Nación.
La jornada estuvo enmarcada en la realización –el día anterior- del “Primer taller provincial de Gestión de Residuos Hospitalarios”, organizado conjuntamente por el Comité de Residuos de Establecimientos de Salud (RES) del Hospital de Ushuaia y Salvaguarda Ambiental del Programa FESP.
Mejora sustancial en el HRU
El director general del HRU, Eric Manrique, se mostró “muy contento con los logros que ha adquirido el Hospital” y recordó que “esto comenzó a trabajarse en diciembre de 2008, cuando el hospital adhiere a las normas sobre el manejo de los residuos que genera, tras una reunión de Ministerios donde cada provincia tenía que proponer los distintos hospitales para empezar a mejorar aquello que producimos en el área de residuos, ya sean comunes o patológicos”.
Observó que “ante la adhesión del proyecto se hizo un auditoría desde el Ministerio de Salud de la Nación que advirtió que el HRU presentaba varias debilidades”, por lo que “se conformó un comité de trabajo para la implementación de los lineamientos sobre el manejo de los residuos hospitalarios que recomendaban las autoridades nacionales en base a auditorías anuales”.
El titular del establecimiento de salud local celebró que “en la devolución que nos hicieron en estas últimas jornadas que tuvimos se destaca que el Hospital ha mejorado sustancialmente, puesto que pasó de una situación que presentaba muchas vulnerabilidades a estar categorizado con color verde, por su manejo de Residuos Patológicos”.
“Es decir que estamos mucho mejor que cuando empezamos”, aseveró, para anotar luego que “esto se pudo conseguir con el esfuerzo de toda la institución y de las distintas personas que participan dentro del comité”.
El doctor Manrique subrayó que “lo que se ha mejorado es la segregación de residuos, ya que el hospital genera tanto residuos comunes como los que tiene cierta peligrosidad o riesgo patológicos; y al lograr que estos reciban un tratamiento adecuado antes de seguir otras instancias del proceso, el nosocomio puede diferenciarlos”.
Comentó también que a partir de que se comenzó con el proceso “el hospital incorporó un licenciado y un técnico en Higiene y Seguridad”, además de que “personal de Farmacia, médicos, bioquímicos, enfermeros, en lo que es control de infecciones”.