El presidente de Irán, Hassan Rouhani, condenó la decisión de Estados Unidos de imponer sanciones a 25 empresas e individuos sospechosos, según Washington, de estar vinculados al programa nuclear iraní.
Rouhani dijo que ese tipo de sanciones "dañan la confianza mutua y la lealtad", pero aseguró que su país seguirá adelante con las negociaciones que mantiene con EE.UU. y otros cinco país, Reino Unido, China, Francia, Rusia y Alemania.
"La desconfianza se ha profundizado", dijo Rouhani. "Estas medidas no son compatibles con la atmósfera de negociaciones".
El Departamento del Tesoro en Wahington anunció el viernes las sanciones, que afectan a compañías petroleras y navieras, así como a aerolíneas, entre otras empresas.
"Algunas sanciones que impiden la importación de medicamentos o productos comestibles son crímenes contra la humanidad. Nosotros combatimos esas medidas y encontramos formas de contrarrestarlas", dijo Rouhani.
El punto más polémico en las negociaciones gira en torno a la cantidad de uranio que se permitiría a Iran enriquecer, según informes.
Teherán niega que su programa nuclear esté destinado a la fabricación de armas.
BBC Mundo