Además de conformar una mesa de trabajo con las asociaciones protectoras de animales, el sector rural, el INTA y Los promotores de Salud entre otras instituciones, el Municipio de Río Grande coordina entre sus distintas áreas una fuerte campaña de concientización sobre la tenencia responsable de mascotas.
En esta oportunidad, la Subsecretaría de Salud dependiente de la Secretaría de Asuntos Sociales, previene sobre las enfermedades zoonóticas y las condiciones de vida de los animales domésticos.
La doctora Fanny Urquizo Cereceda, médica de dependiente de la Coordinación de Prevención y Promoción de la Salud, compartió al respecto que “estamos trabajando con otras áreas, en este caso, específicamente con el área de Zoonosis y Educación por este problema que surge a partir de los perros asilvestrados y el impacto que tiene en la salud de la gente”.
En este punto observó que “las mascotas que tenemos, en general, tienen posibilidad de transmitirnos gérmenes, que nos pueden ocasionar enfermedades que pueden ser muy aparentes, como por ejemplo, mordidas, que es lo que más vemos; y enfermedades que pueden pasar desapercibidas como infecciones de tipo enteroparasitosis o parasitosis intestinales que ocasionan, sobre todo en los niños, retardo en el crecimiento, son causantes de desnutrición, de mal descanso, de mal desempeño en la escuela, o sea, que hay un montón de cosas que tendrían que ser detectadas en el momento del control y que tiene que tenerse en cuenta a la hora de abordar a una familia con mascota”.
“El problema es que muchas familias no tienen mascotas y tienen esta enfermedad encima por el hecho de que, lamentablemente en la ciudad, muchos vecinos están tomando esto de sacar a los perros a que eliminen materia fecal en la calle, entonces al estar esta materia fecal en la calle se seca, el viento la levanta, uno lo respira y lamentablemente estamos todos en contacto con el riesgo”, advirtió la médica.
Por este motivo, desde el área de Salud de la Municipalidad, “estamos trabajando con parásitos específicamente, con un tratamiento empírico a comienzo de año, y para septiembre, octubre, poder mantener el intestino de los chicos libre de parásitos, pero obviamente, tienen que venir a los controles, esto es en el caso de los parásitos, de las otras enfermedades hay que hacer una prevención eficaz manteniendo el control de los chicos, como el de los animales”.
Informó que “el control se hace una vez por año en niños mayores de 6 años y en adultos inclusive, porque el control no es exclusivo de los niños. Se hace en todos los centros de salud y todos los médicos de la ciudad estamos en condiciones de realizarlo”.
Finalmente explicó que en un control, “uno realiza la detección precoz de situaciones que pueden generar alarma, por lo tanto, nosotros optamos por realizar determinado tipo de estudio de acuerdo al hallazgo, es decir, un control no necesariamente va a implicar un análisis, en algunos casos sí, sobretodo en gente adulta que ya tiene enfermedades o que tiene situaciones de riesgo para otro tipo de enfermedades, ya sean cardiovasculares, metabólicas, entre otras”.