A diferencia de anteriores inicios de períodos legislativos de sesiones de la Legislatura provincial, el operativo de seguridad frente al acto en el que el gobernador Gustavo Melella pronunció su discurso, marcó una gran diferencia respecto de otros años en los que Rosana Bertone sólo permitía el ingreso de su barra de aplaudidores, fiel al estilo de ceguera y sordera que caracterizó a su gestión. En dicho marco, una treintena de afiliados de la Asociación Fueguina de Empleados Públicos (AFEP) y
A diferencia de anteriores inicios de períodos legislativos de sesiones de la Legislatura provincial, el operativo de seguridad frente al acto en el que el gobernador Gustavo Melella pronunció su discurso, marcó una gran diferencia respecto de otros años en los que Rosana Bertone sólo permitía el ingreso de su barra de aplaudidores, fiel al estilo de ceguera y sordera que caracterizó a su gestión. En dicho marco, una treintena de afiliados de la Asociación Fueguina de Empleados Públicos (AFEP) y la agrupación Anusate, se presentaron en el exterior del predio reclamando la mejora salarial de la que aseguraron “estamos muy lejos a lo que ofertan en paritarias”, según dijo José Gómez, de la AFEP, agrupación que por otra parte reclama ser tenida en cuenta en ese ámbito de dicusión.
“Es un error estratégico del Gobierno tenernos afuera”, dijo Gómez, quien reconoció que sí hubo un compromiso de una reunión este lunes en Casa de Gobierno. Mas allá de ello, una vez terminado el acto, Gómez y una representación menor de los manifestantes, fueron recibidos por Melella a puertas cerradas.