A menos de 2 semanas de que venza el congelamiento de los combustibles por 90 días dispuesto a fines de agosto, la Secretaría de Energía de Nación autorizó a partir de hoy una suba de 5% en los precios de los combustibles en surtidor. Este es el segundo incremento que se autoriza desde la entrada en vigencia del decreto de congelamiento. El primero se había producido a mediados de septiembre producto de la fuerte suba del dólar post PASO. Los nuevos valores de los combustibles en Tierra del Fuego son de 40,83 pesos para el litro de nafta súper; de 48,18 pesos el litro de nafta infinia; de 41,99 pesos el litro de ultra diésel y de 49,71 el litro de infinia diésel.
Hasta ayer, el precio en surtidores era de 38,89 pesos el litro de súper; 45,89 pesos el de nafta infinia; 39,99 pesos el de ultra diésel y de 47,34 pesos el de infinia diésel. Ante las versiones que circulaban sobre el posible aumento, durante las últimas horas de la tarde de ayer registraron largas colas en las estaciones de servicio de la Provincia.
El comunicado difundido ayer por el gobierno nacional indica que “el Decreto 601 del 30 de agosto de 2019 faculta a la Secretaría de Gobierno de Energía (SGE) a dictar los actos que resulten necesarios para ir normalizando los precios del sector con el fin de proteger al consumidor, velar por la seguridad del abastecimiento y sostener el nivel de actividad”, y que “con el objetivo de amortiguar el impacto de la finalización el próximo 13 de noviembre, del período de vigencia establecido en el Decreto 566/2019 en los precios en surtidor, el gobierno autorizará una suba del 5% de los combustibles y del dólar de referencia para el precio del crudo, que se establece en $51,77”. Indica que “el aumento, que será reconocido para los precios en el surtidor desde el viernes 1 de noviembre, busca también prevenir eventuales problemas de desabastecimiento que pudieran ocurrir y que la SGE se encuentra monitoreando de forma permanente junto con las entidades empresarias y de consumidores”.
Las petroleras sostienen que el atraso en los precios de los combustibles ronda todavía un 15%, por lo que no se descarta un aumento cercano al 10% durante diciembre y el remanente para enero.