La gobernadora Rosana Bertone encabezó este martes el acto por el nuevo aniversario del Éxodo Jujeño, realizado en las instalaciones del Colegio Integral de Educación Ushuaia “Libertador Gral. San Martín”. “Fue en San Salvador de Jujuy, en el extremo de nuestro país, donde un pueblo entero dejó todo lo que tenía: su hogar, su trabajo, su tierra, sus sembradíos y su pasado en aras de un futuro para todos”, recordó y destacó la Mandataria.
Bertone señaló que “el General Manuel Belgrano, un abogado que por amor a su tierra se convirtió en brillante militar, había entendido que era imposible resistir el ataque realista con los hombres que tenía y que la derrota sería costosísima en la lucha por nuestra libertad”, máxime cuando “no había recibido de Buenos Aires ni los hombres ni los pertrechos mínimos para enfrentar la invasión, sólo la orden de retirarse hacia Córdoba”.
“Abandonar su historia para hacer historia”
La Gobernadora convocó a pensar “lo que significó para Belgrano tomar la decisión de comandar al maltrecho Ejército del Norte y ordenó al pueblo jujeño iniciar el éxodo sin mirar atrás, de abandonar su historia para hacer historia” destruyendo sus casas que habían sido “construidas con sus propias manos y quemar sus cosechas”, dejando todo atrás “para ir hacia adelante”.
Sin embargo, resaltó que “el pueblo jujeño no sólo obedeció al General Belgrano, sino que inclusive lo acompañó en ese camino, en mulas, carretas, sabiendo que con cada paso que daban dejaban atrás lo que era suyo”.
En ese marco sostuvo que “no hubo gente más heroica, batalla más generosa ni gesto más valiente que dejar todo por todos, no dejando a los Realistas lugares para cobijarse, ni comida para alimentarse. No dejaron nada, pero a la veznos dejaron todo; porque el ‘Éxodo Jujeño’ permitió seguir la guerra por la Independencia, fortaleciendo al Ejército del Norte para reiniciar la lucha desde Tucumán”.
La Gobernadora advirtió, por tanto, que “dar es una forma de tener”, toda vez que “sin el sacrificio del pueblo jujeño, la independencia hubiese llevado más tiempo, más vidas y más tierras quemadas”.
“A nadie le gusta dejar lo que es de uno, lo que construyó y logró tener, sea poco o mucho”, reconoció, “pero cuando hacerlo significa libertad y soberanía, algunos pueblos, los elegidos, lo hacen y el pueblo de Jujuy lo hizo”.
“Aprender de nuestra historia”
La titular del Ejecutivo Provincial exhortó a “aprender de nuestra historia” porque si bien “ya no se trata de dejar la tierra que amamos”, ahora es necesario “amar la tierra en que vivimos”.
“Es hora de sembrar y no de quemar cosechas, de construir y no de derribar, de asumir el presente para tener un futuro”, comparó, para señalar luego que “hoy, aquí en nuestra amada Tierra del Fuego, al otro extremo del país, debemos hacer lo necesario para que nuestros hijos no inicien un éxodo voluntario”.
Tras observar que actualmente “no tenemos enemigos afuera”, la Gobernadora pidió “ser dignos de aquel 23 de agosto y darnos una tierra de progreso, sin privilegios para nadie y con los mismos derechos para cada uno”.
“No nos toca irnos sino quedarnos, para construir y sembrar” remarcó, y anotó que “la épica jujeña tuvo un camino mucho más difícil, pero el desafío es el mismo: dejar todo por todos, todo por lo nuestro”.