Se celebraron dos convenios entre el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y el Consejo Federal de Inversiones (CFI) para que se ejecuten desde el Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC-CONICET), dependencia en la cual investigadoras e investigadores del CONICET desarrollan las tareas planificadas. Dicha iniciativa surge por requerimiento del Ministerio de Producción y Ambiente de Tierra del Fuego, en procura de información técnico-científica que permita ampliar el conocimiento local sobre los productos forestales no madereros existentes en las reservas forestales de producción y los depósitos de turba de las concesiones de turberas activas y caducas en la Provincia.
Bajo la denominación “Productos Forestales no madereros (PFNM) en las Reservas Forestales de producción de Tierra del Fuego: fichas técnicas y protocolos específicos de recolección sustentable para Ñire y Calafate”, se propone ampliar y poner en valor los saberes de los PFNM más relevantes, su distribución, usos y características ambientales, como así también realizar recomendaciones generales sobre la recolección sustentable. Según la investigadora del CONICET, Rosina Soler, responsable del proyecto, es importante destacar que la valorización respecto al uso ancestral de muchos de estos productos, la cercanía al bosque, el desarrollo turístico acompañado con la diversificación de la oferta gastronómica y el cambio en los hábitos de consumo, presentan un marco propicio para la difusión y amplificación de aprovechamiento sustentable de este tipo de productos.
“Los protocolos son importantes para la recolección sustentable porque permiten sistematizar el uso o recolección de los productos en relación con las cantidades, la estación del año, las formas de recolección, las proporciones para que el recurso siga estando disponible en las siguientes estaciones de crecimiento e incluso para los productores que hacen uso de las especies que proveen los productos forestales no madereros” afirmó Soler.
Asimismo, la investigadora da cuenta que la relevancia para la Provincia viene de la mano de empezar a trabajar con recolectores de productos forestales, que no necesariamente provienen de la madera, sino de otras especies del bosque nativo de Tierra del Fuego, con la intención de ofrecer herramientas sistematizadas y verificadas técnicamente con base científica, “para que esa recolección no genere un alto impacto en el ambiente, no agote los recursos y que al mismo tiempo promocione la producción de productos forestales alternativos”.
En tanto que el “Plan de cuantificación y caracterización de concesiones de turba con potencial productivo en la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur”, dirigido por el investigador del CONICET, Juan Federico Ponce, propone dimensionar y describir los depósitos de turberas concedidas, activas y caducas, de la porción central del sector argentino de la Isla Grande de Tierra del Fuego. Las citadas concesiones están comprendidas dentro de los únicos sitios con turberas, que pueden ser afectados para la producción de turba en el marco de normativa vigente. Los estudios consistirán en la determinación de la extensión superficial y del volumen de turba para cada concesión, discriminando espesor y volumen de cada variedad de turba, respectivamente, turba rubia y turba negra. Complementariamente se pretende transferir esta información al sector productivo en un marco de desarrollo sustentable e implementación de buenas prácticas.
En palabras de Ponce, “el principal objetivo de este proyecto es proveer información precisa a la Provincia para contribuir a la regulación y el manejo sustentable de las turberas. El plan de trabajo brindará la primera información ajustada y completa sobre volúmenes y tipos de turba presentes en las áreas cuya zonificación, prevista en las normativas provinciales, habilita su uso productivo.”
La ministra de Producción y Ambiente de Tierra del Fuego, Sonia Castiglione, se refirió a “la importancia de construir esta información de la mano de investigadores locales y de una institución con larga trayectoria como el CADIC-CONICET. Claramente esperamos que la caracterización y cuantificación de estos recursos locales aporten información para la generación de políticas que contribuyan no sólo a fortalecer las posibilidades de desarrollo de la Provincia, sino a mejorar la administración y el aprovechamiento sustentable de estos recursos”.