El Jefe de Gabinete, Guillermo Aramburu, hizo referencia a la convocatoria de este domingo a la dirigencia del SUTEF, habla de “una actitud responsable por parte del Gobierno de sentarse a dialogar, a discutir y a debatir”, buscando “resolver un conflicto que se lleva adelante desde hace varios días”.
En declaraciones brindadas a Radio Nacional Ushuaia, Aramburu ratificó que la ley 288 “no será vetada”, aunque “el Gobierno podría haber hecho uso de esa facultad, que es absolutamente legal”.
No obstante, aclaró que “a ese punto no se llega sin antes haber analizado un montón de factores, entre ellos la postura absolutamente intransigente del gremio”, de no entender que “la aplicación del cien por ciento en un mismo periodo o en un mismo ejercicio, implicaría volcar toda la erogación salarial que el Estado tenía prevista para el escalafón docente en ese ítem, lo que es absolutamente inequitativo”.
El funcionario recordó que “el Gobierno nunca desconoció la importancia del reclamo del gremio en cuanto a esta ley”, sino que “se planteaba la alternativa de poder aplicarla en distintas etapas, incluso en hasta tres años para que no haya problemas en las gestiones venideras, y de manera tal que se pueda satisfacer el pedido histórico del gremio de la zona en la antigüedad y la otra parte de los recursos destinarlos a los sectores mas postergados del escalafón”.
En la reunión del domingo, se abordó además la derogación del aumento del 23% otorgado por decreto, habida cuenta de que “cuando la Legislatura sanciona la ley 288 no crea mayores ingresos para sostener esta erogación, sino que lo que hace es ordenar el Ejecutivo que reacomode las partidas presupuestarias, es decir, sacar la plata presupuestada de otro lado para destinarla a esto”, explicó Aramburu.
“Eso motivó que al momento de conocerse la sanción de esta ley, haya que haber suspendido el decreto de aumento, porque lo más probable era que el dinero que estaba destinado a ese decreto se tenga que redistribuir hacia el cumplimiento de esa normativa que hoy estaría siendo ley”, añadió.
Asimismo, el funcionario criticó que la Legislatura “no haya dado el espacio de discusión” convocando al Ejecutivo antes de sancionar en sesión especial la reforma de la ley 288, “para ver el impacto que esto tendría por lo menos, en el ámbito negocial, ya que el Gobierno es parte de una negociación paritaria”.
“El SUTEF tiene abierto hace 8 años una negociación colectiva, y creo que antes de tomarse una decisión de esta naturaleza, debió haberse consultado por lo menos a este espacio en qué se había avanzado y en qué no, pero también entiendo que esto ha sido un pedido del gremio y no de los legisladores”, consideró.
Por otro lado, el Jefe de Gabinete planteó en el encuentro con el SUTEF “que el espacio paritario pueda continuar mañana (por el martes) y eventualmente evaluar las distintas alternativas con el Ministerio de Economía, y de ser posible resolver el desfasaje que se genera a los cargos más postergados del escalafón”.
“Tengo toda la expectativa cifrada en que se llegue a una solución” afirmó Aramburu. “Uno de los planteos que me parecen absolutamente razonable de parte nuestra era la reglamentación de este reclamo histórico, de manera tal que permita mejorar la oferta salarial para los más postergados del escalafón, pero el gremio fue absolutamente intransigente en esa postura. Aspiro a que se llegue a un acuerdo, pero hay cuestiones que dependen de la otra parte que ya dio muestras acabadas de intransigencia”.
En otro orden, el Jefe de Gabinete se refirió al paro de actividades y al pedido de juicio político a la Gobernadora Ríos que impulsan los gremios y Directorio del IPAUSS.
“Creo que las dos reacciones son propias de quienes no quieren ver la realidad, porque la verdad que un paro no ordena el sistema, no hace aparecer plata, no hace más justo el sistema previsional o asistencial. No entiendo cual es la lógica de que un paro pueda ser un elemento que vaya a resolver la situación caótica que tiene el IPAUSS”, dijo.
“Me parece que sería importante que desde el mundo periodístico se instale que el IPAUSS es de los trabajadores”, agregó Aramburu, “con lo cual, cuando los gremios públicos dicen que hacen un paro por el IPAUSS, yo puede entender que se hacen un paro a sí mismos”.
El Jefe de Gabinete cuestionó que “los gremios no quieran reconocer que el sistema no es sustentable en sí mismo”, y que entonces “no pasa por la deuda que tenga este u otro gobierno. Creo que hemos sido el gobierno que más esfuerzo ha hecho en pagar el 100% de los aportes y contribuciones, y en contraposición, lo que se ve es la imposibilidad de afrontar la erogaciones básicas que tiene el IPAUSS, como es el haber previsional”.
“A mí me preocupa que un gremio sostenga que el problema del IPAUSS es la deuda y que no planteen la sustentabilidad del régimen” continuó el funcionario. “La dirigencia gremial es irresponsable en pretender mentirle a sus afiliados diciéndoles que el problema se resuelve con un paro o con un juicio político a quien eventual o coyunturalmente administra el Estado. No ven la realidad, y me parece preocupante el mensaje que dan a los trabajadores, y que no expliquen a los trabajadores que recién ingresan que por la postura rígida e irracional de quienes hoy resultan sus representantes, esa gente no va a tener su Instituto o su haber previsional”.
A manera de ejemplo, el Jefe de Gabinete mencionó que “hace seis años que estoy en este cargo y escuché a (Miguel) Olivares hablar barbaridades del Gobierno por la deuda del IPAUSS y sin embargo, es el primero o uno de los primeros dirigentes gremiales que se jubiló con los 25 inviernos. Entonces, quiere decir que estamos frente a mezquindades de los dirigentes sindicales que no se las transmiten a sus propios representados”.
Aramburu consideró también que en este panorama “discutir el aumento de las contribución patronal como único elemento del sostenimiento del régimen, me parece un irrisorio parche”
“Una cosa es evaluar el aumento de las contribuciones patronales en el marco de una solución generalizada, sustentable, racional y que depure el régimen, acompañado de otras medidas que tiendan a reducir el déficit que tiene el Instituto. Ahora, si la única solución que ven es esa, me parece que es una locura, es seguir manteniendo la agonía por un tiempo más, un respirador artificial”, graficó.
El Jefe de Gabinete apuntó asimismo al bloque del Frente para la Victoria “que se llena la boca hablando de esto, pero yo quisiera escuchar la voz de los legisladores Arcando o Martínez que estuvieron en la ANSES y que saben cómo es el régimen de jubilación a nivel nacional, o quisiera escuchar la voz de Tapia que es dirigente de la UOM, como le explica a sus compañeros que se jubilan en una determinada edad y los empleados estatales, en otra”.
“Parece que la culpa la tiene quien administra solo porque administra” sostuvo, para recordar que “de parte del Gobierno se han remitido en varias oportunidades distintas alternativas y todas fueron automática y sistemáticamente rechazadas, porque ni siquiera la evaluaron o analizaron”.
Aclaró que el reciente plan de pagos “es una propuesta en el marco de una comisión legislativa creada por ley y en función a una certificación de deuda que ha hecho el Tribunal de Cuentas”, y que hasta el momento, “salvo de ATE que ha tenido una conducta distinta, más que quejas de los gremios no he escuchado, y ninguna propuesta concreta”, concluyó.