El pasado sábado arribó a la ciudad la dotación saliente de la Base Antártica Belgrano II, la más austral de la Argentina, que inverno durante el año 2014.
La dotación está compuesta por 18 hombres, de los cuales trece pertenecen al Ejército Argentino quienes fueron encargados de las tareas logísticas de la Base, dos Observadores Meteorológicos de la Fuerza Aérea Argentina y tres Científicos del Instituto Antártico Argentino dependiente de la Dirección Nacional del Antártico.
El Subdirector Antártico del Comando del Ejército Argentino, Coronel Guillermo Lorente agradeció el acompañamiento del Gobierno de la Provincia, a través de la Coordinación de Antártida como así también de todas las personas involucradas en esta operación.
En esta oportunidad, el relevo se realizó de forma aérea y con total éxito, ya que las condiciones meteorológicas fueron las mejores para hacer este tipo de operaciones.
Lorente, destacó la satisfacción de la dotación que ha pasado más de un año en esas latitudes de la patria, y aseguró que “los embargó la alegría de pisar nuevamente territorio nacional, y el reencuentro con las familias que se efectuará este domingo”.
En el mismo sentido, aseguró que la dotación entrante para la Campaña 2015 “es un grupo humano que ha sido entrenado durante 37 semanas en la Escuela de Capacitación Antártica que tiene el Ejercito, por lo que van a afrontar con éxito toda la misión encomendada”.
La Base Antártica Belgrano II está constituida por una serie de instalaciones de investigación científica ubicadas sobre el nunatak, en la bahía Vahsel, a orillas del Mar de Weddell y está emplazada sobre roca firme, lo que genera condiciones únicas desde el punto de vista geológico y sismológico.
Por su parte, el Jefe de Base de la Dotación Saliente de la Campaña 2014, Capitán Daniel Adrián Jaeggi, comentó que “se realizaron un sinfín de actividades, empezando por las actividades logísticas para dos años como así también las tareas de apoyo logístico” y agregó que “nos sentimos muy contentos porque desde aquí nos apoyaron a través de los medios y eso nos hace sentir más cerca del continente. Pensar en la Antártida es una cosa y vivir allí es, otra”.