Durante la goleada por 6 a 2 contra Deportivo Cali, por la Copa Libertadores, fue elocuente el pésimo estado del césped en la cancha de Boca , como consecuencia de las lluvias de los últimos días, sumado a problemas de mantenimiento del club. En un comunicado oficial, los dirigentes habían asegurado: "La principal razón de este problema son los palcos de la cancha, ya que genera sombras y obstaculiza el viento, por lo que produce una zona muy crítica que dificulta las tareas de prevención".
Durante la goleada por 6 a 2 contra Deportivo Cali, por la Copa Libertadores, fue elocuente el pésimo estado del césped en la cancha de Boca , como consecuencia de las lluvias de los últimos días, sumado a problemas de mantenimiento del club. En un comunicado oficial, los dirigentes habían asegurado: "La principal razón de este problema son los palcos de la cancha, ya que genera sombras y obstaculiza el viento, por lo que produce una zona muy crítica que dificulta las tareas de prevención".
Lo cierto es que Boca continúa jugando una carrera contra el tiempo para presentar un césped en condiciones para el superclásico del domingo. Guillermo Barros Schelotto se refirió al tema y fue crítico, aunque tiene esperanzas: "No lo volví a ver. El miércoles no estaba bien. Ya van dos días de sol, así que algo se debe haber recuperado. Quedan dos días más y espero que se haga un buen trabajo".
Desde ayer, los cancheros del club decidieron encender gigantescos ventiladores a un costado del campo de juego para tratar de acelerar el secado del terreno. Además, se prepararon bolsas de arena por si se decide volver a cubrir las zonas afectadas como se efectuó ante Deportivo Cali.