El conjunto de acciones que planifica la DPOSS estipula intervenir en los lugares impactados negativamente por los vuelcos de líquidos cloacales sin tratamiento y obras para eliminar la acción contaminante de los efluentes. El Plan de Remediación Ambiental de Ushuaia (PRAU) que la Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarios (DPOSS) presentó recientemente a la Justicia, buscará poner a la ciudad dentro los estándares ambientales de las normativas provinciales, nacionales e internacionales, actuando en los lugares impactados negativamente por los vuelcos de líquidos cloacales sin tratamiento y realizando obras para eliminar la acción contaminante de estos efluentes.
Entre las acciones iniciales de este plan, se proyectó la construcción de dos puentes de vinculación entre las bahías Encerrada y de Ushuaia, lo que "permitirá la circulación natural del agua entre ambas, aumentando la oxigenación, y contribuyendo a la remediación natural del sitio".
También se planificó el acondicionamiento de los conductos de desborde y alivio del Colector Máximo de Perito Moreno y Maipú y los de descarga para vuelcos controlados del dominio privado sobre el Canal Beagle, para evitar los vuelcos en seco sobre la costa y el litoral marino, tapado con materiales rocosos naturales y revegetación.
Además, establece la construcción de estructuras de control de la erosión sobre el Canal Beagle y la prolongación de las pasarelas peatonales ubicadas en la costa del mismo, la parquización mediante colocación de estructuras de descanso y contemplación con el objetivo de "la disminución del impacto visual urbano, contribuir al amalgamamiento del paisaje natural y el urbano, y estimular la apropiación del espacio por parte de los ciudadanos".
También se contempla la eliminación de vuelcos puntuales en ríos y arroyos, y dentro del plan de acciones más profundas está la remoción de sedimentos de la Bahía Encerrada y la implementación de un "Sistema de Aireación Forzada para la Bahía Encerrada", para permitir la remediación natural, la que se encuentra "fuertemente condicionada por las bajas temperaturas del medio acuático, situación que determina una tasa baja de descomposición".
Se planificó asimismo la remediación de humedales y turbales afectados por la descarga de efluentes cloacales.