Ante las advertencias de la empresa Autobuses Santa Fe de retirarse de la ciudad si no se eleva el precio del boleto de colectivo a 13 pesos, y no se le cancela una supuesta deuda de 1,2 millones de pesos en concepto de subsidios adeudados por la anterior gestión, la Municipalidad de Ushuaia analiza diversas alternativas.
Lo confirmó el secretario de Gobierno de la ciudad, Oscar Souto, quien remarcó que a su vez Autobuses mantiene una deuda por infracciones impagas que asciende a 4 millones de pesos.
Respecto a la audiencia tarifaria en la que se trató el pedido de aumento realizado por la empresa el funcionario detalló que "contó con una importante presencia de vecinos, lo cual no sucedió en otras oportunidades", y en ese espacio "los asistentes coincidieron en un fuerte reclamo por un servicio deficitario tanto en lo que respecta a la amplitud horaria, que obliga a esperas de hasta una hora en algunas paradas, como al mal estado de los vehículos".
"La empresa solicitó un boleto a 13,28 pesos duplicando el costo actual, lo que a los representantes de la Municipalidad les pareció una locura", amplió, y dijo que "un boleto de alrededor de 9 pesos está en sintonía con lo que se está pagando en Río Grande por el mismo servicio", aunque "ahora será facultad del Concejo Deliberante llevar adelante la discusión y fijar un precio acorde".
En tanto, sobre las amenazas de la empresa señaló que Autobuses Santa Fe "reclama una deuda por subsidios atrasados de la anterior gestión municipal de 1,2 millones de pesos, que nosotros no tenemos verificada", mientras que "nuestros números nos dan unos 750 mil pesos, y alrededor de 100 mil pesos en concepto de tarjeta SUBE".
En ese sentido, aseveró que "no estamos dispuestos a aceptar esto que suena a una extorsión, que es que 'si no me pagan o no me aceptan este monto yo me voy'. Sobre todo cuando la empresa está debiendo a la Municipalidad alrededor de 4 millones de pesos en concepto de multas no pagadas durante 2014 y 2015".
"Los de las multas son montos actualizados", remarcó el secretario de Gobierno, a lo que sumó que "la empresa tiene la costumbre de no asistir a las audiencias por las infracciones, y si bien anteriormente hicieron algunos convenios por algunas multas hay una gran cantidad impagas y que son exigibles por el Juzgado de Faltas".
Ante este panorama Souto observó que "hay distintas alternativas si es que la empresa decide retirarse y no aceptar ningún tipo de negociación razonable, ni cumplir con lo acordado".
La primera es que Autobuses "acepte retomar negociaciones en base a lo establecido, ya que hoy están circulando 14 ó 15 vehículos cuando debería haber 20 en la calle y dos de reserva; además hay que plantear una readecuación de los recorridos y llegar a sectores que no se cubren, y para ello hay que hacer un estudio".
"Las otras alternativas son hacer un llamado a licitación o bien utilizar una herramienta que hoy tiene a su disposición el intendente Walter Vuoto que es la Sociedad del Estado -que se creó en diciembre por ordenanza aprobada por unanimidad por el Concejo Deliberante-, para que se haga cargo del transporte de colectivos en la ciudad".
Por último, Souto apuntó que "muchas de las cosas que tienen que ver con los servicios de la ciudad tienen que pasar por el Concejo Deliberante, y una de esas es la tarifa del transporte público de colectivos".