Un 21 de diciembre de 1991, los presidentes de once de los quince países de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) ratifican la fundación de la Comunidad de Estados Independientes con la firma del Protocolo de Almá-Atá (Kazajistán), con lo que confirman la disolución del mayor bloque socialista. Además, marcó el fin de la Guerra Fría con el bloque de países capitalistas liderado por Estados Unidos.