El Banco de Tierra del Fuego realizó un balance de la implementación y colocación de las líneas crediticias derivadas del Programa de Recuperación Económica y Social (PROGRESO). En este contexto, ya se otorgaron más de 100 millones de pesos en líneas específicas de este programa, que se suman a los más de 247 millones en créditos al sector productivo que la entidad ya viene impulsando desde el primer momento en que comenzaron a sentirse los efectos de la pandemia mundial COVID 19.
Desde la Entidad destacaron el trabajo constante para potenciar su rol como Banco de fomento de la actividad económica de la Provincia, siempre desarrollando herramientas financieras diseñadas acorde con las necesidades del contexto económico local. Pero con la inyección de liquidez a raíz de la sanción de la Ley N°1312, la Institución pudo encarar una nueva etapa, ampliando la oferta de las herramientas financieras ofrecidas a sus clientes y mejorando considerablemente las condiciones de las mismas gracias al trabajo en conjunto con el Gobierno de la Provincia.
Con el objetivo central de asegurar el sostenimiento de los actores económicos más afectados por la crisis, y luego de un análisis inicial, se determinaron las necesidades urgentes del sector productivo de la Provincia, para elaborar líneas de préstamo específicas para cada una. De esta forma, y de acuerdo con el artículo 6 de la Ley N° 1312, el Banco se abocó al diseño de créditos destinados al pago de nóminas salariales, sueldo anual complementario, pago de alquileres comerciales, capital de trabajo y adquisición de bienes de capital. Las condiciones favorables de estos préstamos se piensan para sostener a las empresas hasta una esperada recuperación de la actividad, estableciendo períodos de gracia y plazos de pago acordes con las necesidades de cada destino y sector productivo.
Para facilitar el acceso de las solicitudes se estableció junto al Ministerio de la Producción y Ambiente un único canal de ingreso para todos los interesados en acceder a las líneas de asistencia y realizar un análisis rápido del cliente para determinar si sería asistido por el Banco o por el Ministerio de acuerdo con el artículo 7° de la Ley.
Hasta el momento, los casos a cargo del BTF son alrededor de 437 con los que se establece un primer contacto dentro para interiorizarse más sobre las necesidades y comenzar a intercambiar informes y documentación. De este total ya se liquidaron más de 100 millones de pesos en 90 operaciones, destinadas a 75 empresas, de las cuales 21 corresponden a la ciudad de Río Grande, 49 a Ushuaia y 5 a Tolhuin.
Por otro lado, las solicitudes de alrededor de 60 operaciones se encuentran ya en etapa final en las oficinas del BTF, o esperando la liquidación en los próximos días. Cabe señalar que cerca de un tercio del total de inscripciones aún no contestaron al contacto inicial, ya sea por haber desistido de la solicitud o por estar en el proceso de recopilar la información solicitada. Con el resto de los clientes se mantiene una fluida comunicación para asistirlos en el armado de la carpeta, de forma tal de cumplir con todos los requerimientos formales para poder continuar el trámite a la brevedad.
Para poder hacer frente al incremento de la demanda y de las consultas, el Banco realizó numerosas adecuaciones que involucraron desde la reubicación y capacitación de los Recursos Humanos, hasta la transformación de sistemas informáticos. Asimismo, se rediseñó el proceso de análisis y de definición de solicitudes de manera simplificada, minimizando los requerimientos de información económica y financiera, y generando un procedimiento para reducir a la mitad el tiempo desde cumplimentada la documentación necesaria para la solicitud formal hasta el proceso de liquidación de la operación.
En este contexto el Banco continúa también impulsando líneas adicionales orientadas a los individuos y con efectos positivos sobre los sectores más castigados por la crisis sanitaria. Es así que, desde el comienzo de la cuarentena en el mes de marzo, el BTF colocó cerca de 270 millones de pesos en distintos tipos de préstamos del segmento individuos. Por otro lado, se inyectan en la economía millones de pesos destinados a sostener promociones en cuotas con tarjetas de crédito que ayudan a mantener de alguna forma el consumo y la actividad comercial de la Provincia.
A medida que se avanza en la ejecución de este ambicioso programa de asistencia, el Banco proyecta el desarrollo de nuevas herramientas que permitan ya no solo el sostenimiento de las empresas y las fuentes de trabajo, sino también el progreso de la actividad económica y sus principales actores. Estos encuentran ahora en el BTF un organismo con las herramientas necesarias para ayudarlos también en una senda de crecimiento, con productos y servicios financieros de calidad a costos significativamente menores que los de la competencia.
La creciente reciprocidad, en la que el Banco asiste al sector productivo incrementando la relación comercial, permite proyectar la generación de un círculo económico virtuoso en el que los fondos orientados a mejorar el desarrollo de cada empresa y de los individuos que de una forma u otra dependen de ella, regresen al circuito productivo fortaleciendo a las finanzas productivas y familiares y, en consecuencia, robusteciendo integralmente la economía de Tierra del Fuego.