Dos adolescentes indias, primas de entre 14 y 16 años, aparecieron colgadas de un árbol en mayo en el distrito de Badaun, Uttar Pradesh, en el norte del país, una escena que causó indignación a nivel local, nacional e internacional.
En primer lugar las autoridades siguieron la línea de investigación que sugería se había tratado de una violación grupal seguida de asesinato.
Luego se habló de la posibilidad de que algunos familiares estuvieran detrás de la muerte.
Y ahora, tras meses de pesquisas, la Oficina Central de Investigación (CBI, por sus siglas en inglés), la principal fuerza de policía de investigación del país, dijo que las muchachas, de casta baja, se suicidaron.
"Las últimas revelaciones de la CBI son desconcertantes y muchos no las creerán", dijo Geeta Pandey, de la BBC en Nueva Delhi.
Activistas de derechos de la mujer pidieron al organismo que siga investigando.
"La CBI intentó amañar el caso y salvar a los acusados desde el principio", le dijo a BBC Hindi Sohan Lal, padre de una de las adolescentes.
"Estoy muy enojado con su decisión; el equipo no demostró nada de presteza durante la investigación del caso".
"40 reportes científicos"
Se cree que las muchachas desaparecieron durante la noche del 28 de mayo tras salir de casa, donde no tienen baño, para ir a hacer sus necesidades.
Un primer examen post mórtem realizado en forma preliminar por tres médicos de la zona de donde eran las jóvenes hablaba de múltiples ataques sexuales y muerte por ahorcamiento.
Pero según los investigadores de la CBI la ropa y efectos personales de las muchachas fueron examinados por un centro de análisis de ADN y no se hallaron pruebas de abuso sexual.
"En base a unos 40 reportes científicos la CBI concluyó que las dos menores del caso de Badaun no fueron violadas y asesinadas como se había alegado (en un principio)", dijo el jueves la portavoz de la CBI, Kanchan Prasad, el jueves.
"La investigación concluyó que se trata de un caso de suicidio".
Sospechosos libres
Tres hombres que habían sido detenidos en relación al caso fueron puestos en libertad bajo fianza en septiembre.
Los investigadores se habían negado a procesarlos, porque decían que no había suficiente evidencia.
Dos policías que también habían sido detenidos, acusados de negligencia en el cumplimiento del deber y conspiración criminal por no tomar en serio la denuncia de los familiares de las adolescentes, también fueron puestos en libertad bajo fianza en septiembre.
Una historia cada vez más turbia
Quienes han estado siguiendo el caso consideran que la historia se ha vuelto cada vez más turbia.
En un momento, funcionarios aparecieron cuestionando los testimonios de las familias de las víctimas, a las que acusaron de no pasar pruebas de detectores de mentiras.
luego los investigadores expresaron dudas acerca de la credibilidad del principal testigo (un vecino de las jóvenes), en medio de versiones que aseguraban que había recibido dinero de las familias.
Geeta Pandey, de la BBC, recordó que hace algunos meses fue sugerido que las adolescentes podrían haber sido asesinadas por familiares por haber roto alguna norma social.
"La última declaración del jefe de la CBI, donde dice que las muchachas se suicidaron "por presión familiar", por su amistad con alguien del pueblo le dio un nuevo giro a la historia", dijo Pandey.
"Los indios empiezan a preguntarse si alguna vez sabrán qué sucedió realmente en la noche en que las dos jóvenes murieron", concluyó.
BBC Mundo