Desde diciembre de 2015, y continuando el trabajo que venía haciendo en la gestión anterior, la Comisión Nacional de Pensiones Asistenciales genera altas y bajas en el sistema todos los meses, cumpliendo la ley y cuidando a quienes más lo necesitan. Las pensiones no contributivas son una herramienta establecida por ley para acompañar a grupos vulnerables o especiales.
Desde diciembre de 2015, y continuando el trabajo que venía haciendo en la gestión anterior, la Comisión Nacional de Pensiones Asistenciales genera altas y bajas en el sistema todos los meses, cumpliendo la ley y cuidando a quienes más lo necesitan. Las pensiones no contributivas son una herramienta establecida por ley para acompañar a grupos vulnerables o especiales.
Hay cuatro tipos de pensiones: 1) a las personas incapacitadas en forma total y permanente, 2) a las madres de siete o más hijos, 3) la pensión a la vejez, que está siendo reemplazada por la nueva Pensión Universal al Adulto Mayor, y 4) las “pensiones graciables” que entregó el Congreso. Estas cuatro categorías suman alrededor de un millón y medio de personas, de las cuales alrededor de un millón son pensiones por invalidez. Todos los años, desde que existe el sistema, se dan de baja miles de pensiones, cuando sus beneficiarios dejan de cumplir con los requisitos establecidos por ley. En 2015, por ejemplo, fueron dadas de baja 168.500 pensiones. En 2016 se dieron de baja muchas menos, alrededor de 90.000. La reglamentación que establece estos criterios rige desde 1997 y no se ha modificado. Las bajas efectuadas se deben exclusivamente a incompatibilidades e irregularidades detectadas en las revisiones periódicas que se realizan de acuerdo a los criterios que establece la ley. No hemos modificado ningún requisito de inclusión a las pensiones. Seguimos trabajando con el mismo sistema, criterios y normas reglamentarias existentes. Los controles son mensuales. Creemos que quien merece y necesita una pensión, hoy la tiene. De todas maneras, si cometimos algún error en algún caso específico será considerado y resuelto a la brevedad. Independientemente de esto encontramos que, como sucedió en otras áreas del gobierno, durante los últimos años se desvirtuaron los requisitos de otorgamiento de pensiones. Entre 2003 y 2015 la cantidad de pensionados se multiplicó por cinco, de 300.000 a casi un millón y medio.