Carla Cárcamo Guerrero es estudiante de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, y este lunes 13 de diciembre emprendió una travesía a la Península Mitre que la llevará a recorrer a pie y en solitario más 320 kilómetros.
Ubicada en el extremo sudoriental de la Isla Grande donde termina el continente americano y la Cordillera de los Andes toca el mar, la Península Mitre es uno de los pocos lugares que han resistido al avance humano, manteniendo sus paisajes impactantes y prístinos donde pocas personas se atreven a aventurarse.
Carla, más conocida como "Carly, tiene 41 años, es fueguina y desde pequeña quedó maravillada por los relatos sobre la Península donde la aventura, el misterio y la realidad se conjugan para acrecentar los mitos que existen sobre estas tierras. Su ingreso a la Universidad pública, a la carrera de Turismo, profundizó su vocación por explorar la naturaleza que ofrece su tierra nativa y, asimismo, fue donde encontró el apoyo necesario para reimpulsar esos anhelos personales.
“Crecí escuchando historias que decían que Península Mitre era una tierra mágica, llena de animales salvajes, donde las mareas eran implacables y me prometí a mí misma que algún día la visitaría. Así se dio la primera oportunidad cuando, junto a un grupo de amigos, hice una expedición de quince días para buscar los restos de un avión que se había estrellado en los años 80 en el Monte Arreola. Luego tuve otras experiencias, donde pude adentrarme en estos territorios y conocí gente que hace patria en esos rincones de nuestra geografía”, comentó Cárcamo Guerrero.
Los tiempos difíciles que impuso la pandemia de Covid-19 aceleraron sus deseos de realizar este recorrido en solitario para lo cual tuvo que llevar a cabo un intenso y exigente entrenamiento durante doce meses. Luego, tuvo que llevar a cabo una importante planificación: desde la organización familiar, ya que es madre de familia, hasta la programación del recorrido que la llevará a su derrotero de más de 25 días de trekking, desde el norte del río Yrigoyen hasta el río López; la provisión de alimentos, etc.
Esta vez el camino lo hará de forma solitaria, pero en compañía de un perro llamado “Toby” el cual ya participó de sus anteriores experiencias. “La Península manda, e irá marcando el ritmo del recorrido. La Navidad pienso pasarla a solas con mi perrito donde nos toque y el Año Nuevo espero recibirlo en Bahía Aguirre, donde se acercará mi familia”, adelantó la joven.
Cabe destacar que Carla Cárcamo Guerrero escribirá una bitácora para compartir sus conocimientos y vivencias sobre estas tierras tan lejanas y cercanas a la vez, con el fin de apoyar el “Proyecto de creación de un área protegida en el extremo Sudoriental de la Isla Grande de Tierra del Fuego”. “Esto es una manera de concientizar y acercar a las personas a que conozcan nuestro extraordinario lugar, porque definitivamente no podemos amar lo que no conocemos” concluyó la estudiante de la UNTDF.