Con una ceremonia realizada en instalaciones del Instituto Provincial de Regulación de Apuestas, la Escuela Municipal de Formación Pública cerró su ciclo 2015 consiguiendo un alto nivel de capacitación a empleados municipales.
La subsecretaria de Innovación, Planificación y Gestión Pública, Cristina Morán y Flores, rescató que “hoy la Escuela está culminando con más gente de cuando inicio cuando comenzó la gestión de Gustavo Melella, con compañeros que se recibieron del Secundario y con una gran alegría de todos por haber cumplido un año más de aprender y de saber y de conocer”.
“Es muy emocionante. Lo que yo marcaba es que las capacitaciones al principio entusiasman y después decaen y en esto tenemos el orgullo que cada año, en cada acto, hay más gente y hay más certificados. Este año hemos llegado a los setecientos, así que estamos más que orgullosos. La Escuela ha crecido a punto tal que tiene su propio Coro de Lenguaje de Señas y hoy hicieron su debut aquí, creo que nos emocionamos todos”, dijo Morán y Flores.
En tanto, el intendente Gustavo Melella se mostró emocionado “al ver que más de setecientos diplomas se repartieron hoy, la mayoría servidores públicos, empleados municipales y algunos vecinos que quieren participar de la Escuela. Estamos convencidos de eso, si hay algo que le hace bien a uno, como ciudadano, como vecino y como servidor público”.
Además resaltó que “haber puesto una escuela interna en la Municipalidad para que cada día sirvamos mejor a la ciudad, sirvamos mejor a nuestros vecinos, la verdad que en estos cuatro años es un gran logro”.
En la oportunidad además se entregaron diplomas a agentes municipales que, a través del plan FINES, consiguieron terminar sus estudios primarios o secundarios.
“Esto mejora la calidad de ellos como personas, la calidad como servidores públicos y el servicio a los vecinos que es fundamental”, insistió el Intendente que agradeció “al IPRA el acompañamiento, porque siempre generosamente Ricardo Uribe y su gente acompañan cualquier actividad municipal y esto hay que reconocerlo y decirlo. El vecino tiene que saber que el empleado municipal no cobra ni horas extras, ni un plus por ir los viernes a la tarde fuera del horario laboral, ni los sábados a la mañana o a la tarde, o hasta un domingo, entonces, es doblemente valorable, doblemente reconocer el esfuerzo que hacen. Son papás, son mamás, trabajan sirviendo a la ciudad, algunos hasta tienen otra tarea extra y, sin embargo, van a capacitarse, van a formarse, van a estudiar. Así que la ciudad tiene que felicitarlos”.