La Gobernadora Fabiana Ríos adhirió a la acción de amparo colectivo elevada a la Justicia por violencia de género y discriminación, presentada por las diputadas nacionales Juliana Di Tullio, Diana Conti y Teresa García, contra la Revista Noticias de la Editorial Perfil. S.A, en cuya última edición se publicó en tapa una caricatura de la Presidenta de la Nación Cristina Fernández.
La Gobernadora Fabiana Ríos adhirió a la acción de amparo colectivo elevada a la Justicia por violencia de género y discriminación, presentada por las diputadas nacionales Juliana Di Tullio, Diana Conti y Teresa García, contra la Revista Noticias de la Editorial Perfil. S.A, en cuya última edición se publicó en tapa una caricatura de la Presidenta de la Nación Cristina Fernández.
La acción de amparo presentada por las parlamentarias tiene por objeto “hacer cesar y reparar las consecuencias perjudiciales devenidas desde la publicación del día 8 de septiembre de 2012, en la nota “Pagina 28-33”, y tapa de la Revista Noticias, titulada: “El goce de Cristina-Psicoanálisis de la cadena permanente”, donde se replican estereotipos de género degradantes hacía todas las mujeres.
De acuerdo a las diputadas, la publicación da a entender que las mujeres en cargos políticos se comportan de manera inadecuada y tienden a mostrarse “desenfadadas”, siendo éste un comportamiento “sensual y hasta procaz”, y por lo tanto condenables.
En virtud de estos argumentos, “pretendemos que se considere este acto gravemente violatorio de los derechos reconocidos por la Constitución Nacional y los instrumentos internacionales de Derechos Humanos y se determine la urgente retractación pública, por parte del medio gráfico en igual día y tirada que la nota en cuestión”.
Tanto en la portada como en la nota de tapa publicada en las páginas 28 a 23, se ejerce claramente violencia simbólica y psicológica, contra todas las mujeres de acuerdo a lo establecido por la ley 26.485.
Las Diputadas entienden que dicha publicación “no solamente es lesiva respecto de la persona de la Presidenta de la Nación, sino de las mujeres en general al asimilar el ejercicio del poder y sus modos de comunicación, con el ejercicio de una sexualidad a la que, además valora peyorativamente”.