El Municipio de Ushuaia, a través de la Subsecretaría de Gobierno, encabezó un encuentro con la Administración del Parque Nacional Tierra del Fuego y el Escuadrón 44 de Gendarmería Nacional para coordinar las acciones tendientes a resolver el problema de ganado equino que, sin autorización y de modo irregular, se encuentra dentro de la jurisdicción del Parque Nacional. El encuentro fue convocado por el Subsecretario Omar Becerra para dar cumplimiento a la disposición del Juez Federal Federico Calvet que dio un plazo de 30 días para proceder de acuerdo al protocolo de procedimiento vigente en la Municipalidad y hacer cesar el daño que provocan los caballos sueltos dentro de tierras de parques nacionales. “Estamos trabajando para resolver la situación que es grave, en este caso con un plazo dispuesto por la Justicia para la presencia de caballos sueltos en el Parque Nacional, pero que es un problema real en otros puntos de la ciudad”, dijo Becerra.
En este sentido el funcionario indicó que “invitamos a los propietarios de ganado equino a que se acerquen a la Municipalidad para registrarlos y también les pedimos un grado de responsabilidad y de compromiso con su ciudad, sus vecinos y su entorno”. “Para resolver este problema necesitamos de la colaboración de todos los habitantes, más allá de las acciones que llevamos adelante desde nuestra gestión y del trabajo coordinado que encaramos”, advirtió Becerra.
En el encuentro se definió la zona crítica como así también las dificultades que existen ante la falta de identificación de los animales; la inexistencia de marcas o marcas no registradas y regularizadas; la precariedad de cercos o la destrucción de los mismos y las posibles alternativas de solución definitiva del problema.
El Intendente del parque nacional Tierra del Fuego, Daniel Ramos, explicó que “se hizo una reunión vinculada a la presencia de animales, pertenecientes a vecinos de la ciudad de Ushuaia, que viven en el parque nacional Tierra del Fuego de manera permanente, causando un daño al medio ambiente, especialmente en la zona sudeste del parque, que es la que linda con el ejido”. “El juez propone que se vayan capturando los animales, se identifique a los propietarios, se los chipee tal como establece la ordenanza y a partir de ahí se multe a los propietarios y se concientice a los ciudadanos que los caballos sueltos en el parque o fuera de él constituyen una falta”, explicó.
“En este momento la dificultad que enfrenta tanto el Municipio como el Parque es que muchos de estos animales no están identificados”, dijo Ramos.
Se estima que los caballos en situación irregular ascienden a unos 150, dispersos en distintas zonas. El protocolo establece la captura, el chipeo del animal, la publicación de edictos, imposición de multas, remate en subasta.
El encuentro entre las partes afectadas por la problemática sirvió para avanzar en la organización de las próximas acciones y se fijó un nuevo encuentro para la semana entrante.