Funcionarios municipales, nacionales, provinciales, de Río Grande, de la Justicia y representantes de los veterinarios de Tierra del Fuego consensuaron la implementación de un protocolo para la atención de mordeduras de perros, una de las problemáticas que emergen de los indicadores de salud que elabora la Municipalidad de Ushuaia. En la sala de situación de la Intendencia se constituyó una mesa política y técnica de trabajo y al respecto, la jefa del Programa de Políticas Sanitarias del Municipio, Yésica Garay, detalló que “venimos realizando mesas intersectoriales desde que asumimos la gestión, y en el contexto de los indicadores locales de salud surgió por tercer año consecutivo que las mordeduras de perros es una de las problemáticas más importantes”. En el encuentro participaron la Secretaria de Políticas Sociales Malena Teszkiewicz, quien tiene dentro de su área el programa de Políticas Sanitarias y también la Subsecretaría de Gobierno, que encabeza Omar Becerra, que tiene bajo su órbita la Dirección de Zoonosis.
Destacó que en esta oportunidad “se avanzó con autoridades nacionales sobre la implementación del protocolo de mordeduras de perros, el cual define cómo tiene que intervenir cada institución y cuál es el compromiso que tiene que asumir en el marco del mismo”.
“Es un avance muy importante porque si bien hace dos años se venía trabajando en este protocolo, hasta ahora no se lo había podido aprobar entre todas las instituciones. Hoy logramos leerlo y hacer las modificaciones necesarias, y labrar un acta compromiso que va a formar cada institución, para que de acá en adelante se pueda llevar adelante”, detalló.
Además, resaltó que “estamos dando un acompañamiento muy fuerte al área de Zoonosis para poner a este tema en agenda y buscar la solución entre todos los actores”, ya que “entendemos que se trata de una problemática de salud pública, no solo de Zoonosis, y por eso desde el área estamos haciendo de articuladores entre las demás áreas porque entendemos que la salud es transversal”.
Asimismo, observó que “hay una ausencia de años de políticas que atiendan la problemática de los perros sueltos y hoy tenemos que revertir una situación muy complicada en cuanto a recursos económicos, humanos y edilicios, pero estamos estableciendo prioridades en función de ese recurso escaso que tenemos”.
La funcionaria consideró que “contar con el protocolo es un avance muy importante y el próximo paso será formalizarlo mediante un acta compromiso que van a suscribir las instituciones involucradas, y luego vendrá la parte operativa de la implementación”.
En tanto, a fin de año “realizaremos la primera evaluación del protocolo para ver los aciertos y los puntos débiles, ya que los protocolos son prueba y error. Todas las áreas están muy comprometidas para llevar adelante acciones en conjunto que a corto y largo plazo van a generar un impacto que se va a sentir en la comunidad”.
Garay valoró que “está el compromiso de la gente de Nación de trabajar en conjunto, y además fue muy importante que hayan participado en esta mesa porque se informaron sobre la problemática de la boca de cada uno de los actores que conoce la realidad desde la experiencia, y no desde una base de datos o una estadística que se puede enviar al programa nacional”. Y agregó que “todos entendemos que hay responsabilidades compartidas y que cada uno tiene que aportar lo que le corresponde”.
Por su parte, la directora de Zoonosis de la Municipalidad de Ushuaia, Marcela Garber, informó que en el encuentro “se presentó un plan preliminar sobre manejo canino urbano para el 2017-2022, el cual está dividido en cuatro tramos”, los cuales son “control poblacional, educación para la salud, vigilancia epidemiológica e investigación”. Y comentó que dicha estrategia “tiene objetivos para cada una de esas líneas, además de actividades, indicadores y metas”.
También expresó que para atender “la grave situación por las mordeduras de perros” se consensuó el protocolo que determina las responsabilidades que le compete a cada actor”.
En cuanto a la magnitud de esta problemática de salud pública Garber indicó que “tenemos 30 casos notificados por la Policía pero en lo que va del año en el hospital llegaron 179 casos”, y para poder actuar en consecuencia con los propietarios de los canes que están ocasionando disturbios en la calle “es imprescindible contar con la información en tiempo y forma, y para eso tenemos el protocolo”.
A su vez, el director del Programa Nacional de Tenencia Responsable y Sanidad de Perros y Gatos (ProTenencia), Jorge Cuatrín, evaluó que “el balance es muy bueno porque juntar en una mesa a todos los actores involucrados en esta problemática se da muy pocas veces; se trata de una problemática de salud pública y se debe accionar en forma continua en el tiempo, con todos los actores involucrados”.
El referente de Nación dijo que “aplaudimos que a Zoonosis municipal se le haya dado el rango de Dirección porque jerarquizar determinadas áreas implica poder tener mayor llegada para resolver la problemática. Queremos ver cómo podemos participar en esta problemática a través de insumos, de capacitaciones, y de los requerimientos que haya”.
Resaltó que “hay un proyecto de trabajo y nosotros queremos evaluar lo que se ha hecho y lo que se va a implementar, para lograr que haya un seguimiento más efectivo de las acciones desde nuestro programa”.
Por último, Cuatrín manifestó que “hay cuestiones a atender que son urgentes y hay otras que son más estratégicas y a largo plazo; lo urgente y necesario es poner en acción al área de Zoonosis mediante el refuerzo de insumos y recursos humanos”.