La Presidenta del IPAUSS, Ana Villanueva, mantuvo una reunión este jueves con integrantes de la comisión directiva del Centro de Jubilados Akainik, con el objeto de poner en conocimiento y debatir, el Proyecto de Emergencia Previsional presentado por el Ejecutivo ante la Legislatura.
Además, la funcionaria les recordó que está a disposición para explicar cualquier inquietud que surja respecto de la propuesta. En ese sentido precisó que “no pretende ser por tiempo indeterminado, como tampoco pretende modificar de manera permanente las condiciones jubilatorias, sino que tiene fecha de inicio, que es a partir de la promulgación de la Ley, y la fecha de finalización es el 31 de diciembre de 2015”.
“Luego, en el curso del año, podremos ir elaborando las propuestas que sean más convenientes para la sustentabilidad de la caja”, resaltó.
Al ser consultada sobre las inquietudes presentadas, Villanueva indicó que el tema más preocupante es la movilidad. “Sobre los otros puntos han estado de acuerdo, y sobre todo en términos de aportes que realizarán tanto los trabajadores pasivos como activos”, indicó.
La Presidenta del IPAUSS les informó que el beneficio de la movilidad no se pierde, sino que se establece sobre condiciones de mayor justicia, igualdad, equidad. Va a estar sujeta a un valor índice que se va a calcular cada 6 meses, sobre el semestre anterior y para los 6 meses siguientes, con lo cual “se está dando cierta pauta de estabilidad”, consideró.
Junto con este beneficio, Villanueva destacó los ítems que hacen referencia al no ingreso de trámites jubilatorios hasta el 30 de junio y luego que ingresen aquellos expedientes de quienes tienen más de 50 años de edad y más de 20 de aportes. “Dicha medida detendrá la aceleración creciente que ha tenido el nivel del gasto”, evaluó.
A su vez, les comentó que en enero de 2014 se requirió 80 millones de pesos para abonar haberes jubilatorios, y en enero de este año, esa suma ascendió a 124 millones de pesos, con lo cual el incremento del gasto ha sido del 50%, sólo en haberes previsionales.
“Es un nivel de impacto que no se puede sostener y tampoco se condice con el promedio de aumento que han tenido los empleados en actividad, entonces hay algo que tenemos que revisar”, concluyó.