El operativo comenzó a la 5.30 de la mañana con 50 efectivos, una tanqueta hidrante, un dron y 15 vehículos. Cortaron el tránsito en las calles Belgrano, entre Rodhe y canalito, y en Isidro Lobo, entre Belgrano e Italia para impedir el paso de autos y vecinos. Media hora más tarde Gendarmería ingresó a la sede roquense de la Casa de Estudios y detuvo a las 8 personas que estaban en el interior del edificio. Eran 7 mujeres y un varón. La salida era inminente. No se sabía si las docentes procesada
El operativo comenzó a la 5.30 de la mañana con 50 efectivos, una tanqueta hidrante, un dron y 15 vehículos. Cortaron el tránsito en las calles Belgrano, entre Rodhe y canalito, y en Isidro Lobo, entre Belgrano e Italia para impedir el paso de autos y vecinos. Media hora más tarde Gendarmería ingresó a la sede roquense de la Casa de Estudios y detuvo a las 8 personas que estaban en el interior del edificio. Eran 7 mujeres y un varón. La salida era inminente. No se sabía si las docentes procesadas Victoria y Virginia Naffa estaban entre las detenidas.
Pasadas las 8 de la mañana, se sumaron más gendarmes que formaron una segunda línea para reforzar el corte de calles. Otro grupo retiró las banderas que estaban instaladas alrededor del predio. Estudiantes e integrantes de sindicatos y algunas organizaciones se fueron acercando al lugar. Al menos, hay unas treinta personas presenciaban el operativo. Hubo un momento de tensión cuando compañeras de las detenidas increparon a los efectivos. Reclamaban el destino de la detención ya que no se brinda ningún tipo de información oficial.
Personal de Salud ingresó al edificio para constatar el estado de salud de los detenidos. Finalmente, minutos antes de las 10, Gendarmería retiró a los detenidos y para dispersar a los manifestantes instrumentó una violenta represión arrojando gas pimienta, agua con el camión hidrante y balas de goma. En ese contexto detuvieron a una persona más por lo que la cifra de detenidos subió a 11. La toma comenzó el pasado 12 de septiembre por un grupo de docentes y estudiantes. A principios de este mes, ya estaba vigente la orden de desalojo sin embargo el conflicto se mantenía con final incierto.
Por un lado, el rectorado expresaba su deseo de que se desalojara sin la utilización de la fuerza pública. Por el otro, el grupo de estudiantes y las dos docentes insistía en solicitar una instancia de comunicación.